Tips para ser eficaz en el teletrabajo

Teletrabajo. Una de las palabras que más se han hecho a nuestras conversaciones del día a día en este 2020 del que ya hemos cumplido dos tercios para dejar atrás, y que tan patas arriba ha puesto nuestras vidas. La pandemia del coronavirus nos ha hecho modificar multitud de hábitos, restablecer prioridades y administrar de una manera diferente nuestro tiempo libre. Cómo no, también ha afectado al empleo. Miles de españoles han descubierto lo que es el teletrabajo, con la imposibilidad de reunirse cada día en la oficina como iba siendo habitual, y otros muchos se han tenido que entregar forzosamente a él más que nunca. El teletrabajo no es otra cosa que trabajar a distancia, es decir, desde casa. Y, claro, eso no quiere decir que todo sean comodidades, por lo que vamos con unos tips o consejos para que puedas ser más eficaz, aunque hayas convertido el salón de tu casa en tu oficina.

Lo primero, cómo no, es mantener siempre en mente que estamos en horario laboral y que, cuando estamos trabajando, no estamos haciendo otra cosa. Este es el primer desafío, puesto que el entorno influye mucho y mentalmente hemos de prepararnos para asumir que estamos trabajando pese a que lo que tengamos a escasos metros de distancia sea la televisión, el frigorífico o un sofá de lo más tentador.

Planteémoslo como si nos levantáramos un día normal para ir a la oficina. Suena el despertador, nos desperezamos, vamos al cuarto de baño y desayunamos. Y ahora, ¿qué? Sería el momento de vestirse para salir de casa a la oficina. Pues, salvo por el detalle de abrir la puerta y enfilar hacia la calle, hagamos lo mismo. Mantenernos con el pijama puesto solo hará más difícil liberarnos de la pereza que nos atrapa cada mañana y de lo que solemos hacer cuando nos vestimos así para estar en nuestra casa: descansar.

Estamos en horario de trabajo y tenemos que cumplirlo, por lo que a la misma hora a la estarías encendiendo el ordenador de la oficina debes estar haciendo lo propio con el que vayas a utilizar en casa. Mientras carga, puedes aprovechar para echar un vistazo a tu alrededor. ¿Dirías que es un entorno de trabajo agradable? Una de las claves de favorecer la productividad también está en crear a nuestro alrededor un entorno que nos permita estar concentrados en nuestra labor al mismo tiempo que nos encontramos en comodidad. Asiento ergonómico, buena conexión a Internet, espacio para tomar notas, tener a mano el material de trabajo, contar con la iluminación adecuada, una planta…

Nos ponemos a trabajar y seguimos una lista de tareas ordenadas en prioridad según su urgencia e importancia, algo siempre fundamental para mantener un orden y ser eficaces en cada una de las responsabilidades de las que estamos a cargo. Esto es importante puesto que, si no respetamos un orden, acabamos saltando de tarea a tarea sin haber terminado la anterior a la que le sucede, y perdemos la concentración.

Supongamos que han pasado un par de horas y nuestra productividad ha sido satisfactoria. Quizás sería este el momento de salir a tomar un café y una tostada. ¿Por qué no? Si antes no tuviste o no debías hacerlo, puede ser este el momento para aprovechar y conectar con tus compañeros de trabajo y compartir asuntos relacionados tanto con vuestra actividad laboral como los que no. Algo que causa debate es la música: si en tu oficina te estaba permitido y crees que ayuda a tu concentración, siéntete libre. Pero, si por el contrario es algo que antes te estaba prohibido, y en un ejercicio de honestidad no te consideras la persona más concentrada del mundo, intenta evitarlo.

Eso sí, no olvides que estás trabajando. No extiendas demasiado las pausas para no perder ritmo, y no caigas en la tentación de quitarte alguna tarea del hogar de encima aprovechando que estás en casa, puesto que eso condenará tu productividad y alargará tu jornada laboral, puesto que no podrás cumplir a tiempo lo que tenías que hacer.

Y es que el horario es fundamental. Tienes que respetar el de entrada, pero también el de salida. Y para ello deberás haber cumplido con tus objetivos propuestos en tiempo y forma. En la organización está el secreto.

 

Resumamos:

  • Levántate cada día como si fueras a trabajar.
  • Vístete.
  • Asegúrate de que trabajas en un entorno favorecedor y con disposición de todo aquello que necesitas.
  • Sigue un orden en tus tareas diarias.
  • Mantente en contacto con tus compañeros y superiores.
  • Haz pausas breves.
  • No olvides que, aunque estés en casa en horario laboral, es como si estuvieras en tu oficina: las tareas del hogar, a su debido momento.
  • Cumple el horario de entrada y salida.


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