22 May Los beneficios de la formación de empleados

La formación de empleados consiste en proporcionar herramientas y conocimientos a los trabajadores con el objetivo de mejorar sus habilidades de manera que puedan realizar y mejorar el trabajo que deben llevar a cabo en la organización o empresa. 

Asimismo, existen distintos tipos de formación de empleados pues cada trabajador tiene necesidades concretas y contextos distintos. Los principales tipos de formación de empleados son los siguientes:

• Formación de incorporación: esta formación se realiza enfocada a los nuevos empleados de la empresa y es vital para que estos se sientan acogidos y empiecen a familiarizarse con su nuevo trabajo y las funciones que han de desarrollar en el mismo. En la formación de incorporación se debe dar al empleado la información que necesite, evitando que se sienta perdido, pero sin saturarlo con mucha información, para empezar a desarrollar su trabajo adecuadamente.

• Formación sobre la normativa: conocer la normativa de la empresa y el cumplimiento de la misma eficazmente. En esta formación suele abarcar cualquier tema o asunto legal así como una guía general para el funcionamiento correcto de la empresa. 

• Formación técnica: esta formación no es necesaria realizarla para todos los empleados, solo a los que los necesiten. Consiste en informar a los trabajadores sobre la utilización de una herramienta o tecnología en el lugar de trabajo y puede encargarse de dar la información un empleado superior.

• Formación en habilidades: se trata de una formación enfocada en las cualidades individuales así como la forma de trabajar y relacionarse con el resto de empleados. Algunos temas que puede incluir la formación son cómo escuchar, la capacidad de hablar en público, la comunicación son el equipo, etc

• Formación sobre el producto: como el nombre indica, es una formación centrada en que el trabajador conozca qué está vendiendo y qué ofrece la empresa. Asimismo se mantiene informado al empleado sobre nuevos productos, los competidores, antecedentes y diversas estrategias de marketing. 

• Formación en ventas: se da a todos los empleados de la empresa, es similar a la formación de productos y se enfoca en promover los aspectos de la venta correctamente.

• Formación en liderazgo: en muchas ocasiones hay individuos que poseen características de liderazgo, muy importante para llevar al éxito a una empresa. Por ello se realizan estas formaciones, para aumentar el potencial de liderazgo de los empleados y conseguir los resultados esperados. 

• Formación en seguridad y salud: se suele realizar con regularidad para informar a los empleados de los procedimientos de seguridad, de forma que capacita a los trabajadores a identificar, informar y resolver los problemas, manteniendo la seguridad de todos y reduciendo posibles riesgos o accidentes. 

Beneficios de la formación de empleados 

Ya conocemos qué es la formación de empleados y cuáles son las formaciones que las empresas realizan con mayor frecuencia, sin embargo, ¿qué beneficios pueden aportar a la organización? 

Con la formación de empleados los trabajadores adquieren más conocimientos, habilidades y destrezas, de forma que la empresa consigue trabajadores más formados y expertos. Asimismo, se consigue la integración de los empleados y mejorar la comunicación, y es que ya es sabido que un empleado que se siente cómodo y a gusto trabaja mejor, aumentando la productividad.  

También se consigue que los empleados sepan qué visión tiene la empresa y que la comuniquen mejor a los clientes, de forma que, remando todos en la misma dirección, se conseguirá transmitir unión y aumentar las ventas.

Otro beneficio será contar con empleados que estén informados de todos los productos y servicios y a la última en cuanto a las nuevas tecnologías, adaptándose mejor a la transformación digital, pudiendo resolver cualquier duda que pueda tener algún cliente. 

Además, también aumenta las ventajas competitivas de la empresa, aumenta la calidad de productos y servicios, mejora la motivación laboral así como la competitividad sana y permite cambios de estructura en la empresa de forma sencilla.