22 Oct Participar en proyectos europeos: ¿qué errores debo evitar?
En otro artículo te explicábamos todo lo que necesitas saber si tu empresa busca participar en proyectos europeos. Ahora bien, existen una serie de comportamientos y actitudes que pueden llevarnos a tener una percepción equivocada de los objetivos de estos proyectos.
-
Inmediatez y falta de visión a largo plazo.
En muchas ocasiones, vemos a los proyectos europeos como una manera de enfrentarnos a problemas y oportunidades inmediatas para nuestra empresa, pero no es así. Los tiempos, objetivos y filosofía de estos programas van dirigidos a resolver los asuntos más estratégicos de las empresas, no tanto los más urgentes. En este sentido, es conveniente que enfoquemos nuestra participación en proyectos europeos como una ocasión perfecta para afrontar los retos futuros y estratégicos y aquellas cuestiones que, por falta de tiempo o recursos, no habíamos podido plantear hasta ahora.
-
Rechazo a la colaboración.
Los proyectos europeos pueden aportarnos hasta un 100% de los costes de nuestra empresa. A cambio nos exigen dos cosas fundamentales: publicidad y cooperación. La cooperación empresarial no está integrada en la cultura de muchas empresas, lo que dificulta la organización y gestión de los proyectos. No obstante, existen mecanismos para proteger y delimitar qué se comparte y qué no. Además, en muchos casos, estas empresas no son competidoras sino complementarias, lo que supone una oportunidad para ambas.
-
No elegir el momento preciso.
Algunas empresas que han desarrollado una idea innovadora tienen prisa por obtener el apoyo europeo, lo que da lugar a que se presenten a un proyecto europeo en un estado aún inmaduro. Esto provoca una evaluación negativa de la propuesta, ya que son mayores los riesgos a asumir. Por el contrario, a veces se presentan ideas completamente desarrolladas, buscando únicamente el apoyo para la comercialización (que en algunos casos no ha empezado), lo que nos es un objetivo prioritario de los programas europeos.
-
Los proyectos europeos no son únicamente una fuente de financiación.
Participar en un proyecto europeo puede ser una fuente de oportunidades para las empresas. Sin embargo, la financiación no es la más importante, ya que debe considerarse como un medio para desarrollar las herramientas que harán crecer una empresa, no una manera de mantenerse. Existen otros elementos, como la visibilidad europea adquirida, la entrada y participación en redes, la posibilidad de acceso a nuevos mercados o desarrollar alianzas comerciales, así como la propia continuidad con nuevos proyectos son los valores a buscar en un proyecto europeo.
¿Tienes alguna duda más sobre cómo participar en Proyectos Europeos? En nuestra guía “60 preguntas y respuestas para entrar en el mundo de los Proyectos Europeos” respondemos a las preguntas iniciales que cualquier empresa debe hacerse para participar en estas iniciativas.